Hay veces que pienso en ti
mientras escribo
y se me rompe la punta
del lápiz sobre papel de acero.
Me trago el humo del cigarro,
pienso en el trato que hicimos
en silencio, sin palabras,
con ojos, miradas cómplices.
Entiendo entonces que no
hicimos promesas,
sólo un pacto sin sangre
con saliva,
abiertas mis piernas
en la penumbra
de mi mente rota.

👏👏👏
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